Famosa en el mundo entero, la Dieta Mediterránea es un patrón de alimentación que ha demostrado ser mejor que ningún otro para prevenir enfermedades cardiovasculares. En esta primera entrega de nuestra nutricionista, María Jesús Vicente, nos explica sus fundamentos y el importante rol que juega el aceite de oliva.

Dieta Mediterránea (DM) es un término que el doctor Ancel Keys definió a mediados del siglo pasado, referido al patrón dietético que llevan las regiones productoras de aceite de oliva que rodean el mar Mediterráneo.

En una investigación comúnmente conocida como "estudio de los Siete Países", se asoció el patrón alimentario de los habitantes del sur de Italia, la antigua Yugoslavia y Grecia a un menor riesgo de enfermedad coronaria; y de ahí en adelante, se ha profundizado a través de otros estudios e intervenciones, con los que las cualidades de la afamada DM se han ampliado y confirmado. 

En general, la DM se compone de una gran variedad de productos que convergieron en la cuenca del Mediterráneo cuando esta era el centro de la civilización. Junto con la cultura y costumbres de la zona, el resultado fue un estilo de vida que llamó la atención por sus beneficios y factores protectores de la salud.

Concretamente, podemos decir que la DM se compone principalmente de alimentos de origen vegetal, como cereales integrales, legumbres, verduras, frutas y nuestro querido aceite de oliva. Este último es la principal fuente de lípidos (grasas) de la dieta, y se usa como aderezo, para cocinar y para sofreír, en todas las comidas principales.

Actualmente, el concepto de DM se ha ampliado más allá de los alimentos y abarca también la forma en que los elegimos (según la estación, productos locales, etc.), la forma en que se preparan, y aspectos de la vida personal como la vida en comunidad, la actividad física y el descanso.

¿Por qué hablamos de DM si estamos a unos 12 mil kilómetros de distancia de esa región? Pues bien, en las laderas occidentales de los continentes, entre los paralelos 35 y 40 grados del hemisferio sur, podemos encontrar que se replica este clima mediterráneo. Es decir, nuestro Chile lindo tiene un clima similar al de la cuenca mediterránea en una parte importante de su territorio. Y es en esta zona donde se desarrolla principalmente la actividad agrícola y donde se producen alimentos que forman parte de la DM, entre ellos, aceite de oliva virgen extra de excelente calidad.

O sea, no necesitamos cruzar un océano para llevar una alimentación que sea un aporte a nuestra salud, y por eso tenemos el deber de aprovechar esta oportunidad que nos regala la naturaleza y la agricultura.

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María Jesús Vicente es nutricionista dietista con mención en gestión y calidad de la UNAB. Tiene una especialización de experto en nutrición y salud en oncología de IL-3 de la Universidad de Barcelona.

Trabaja con adolescentes y adultos, y también con pacientes oncológicos, en su consulta de Viña del Mar y online. Su enfoque es desde la prevención, convencida de que con pequeños cambios en los estilos de vida se puede alcanzar mayor bienestar.

Cocinera de corazón, es amante del aceite de oliva y le encanta incorporarlo en sus recetas. Casada, tiene 2 hijos (un tercero en camino), y disfruta viajar y descubrir nuevos lugares y su gastronomía.

www.mariajesusvicente.cl

@mjesusvicentenutricion